sábado, 15 de mayo de 2021

Callao

       Tener las manos llenas es una ilusión porque no veo lo que me digo que tengo, y no siento lo que me repito que es mío. Me llevo las palmas improvisando un cuenco para contener el mundo que me quiero beber y se me derrama. Sé que huye entre mis dedos aún cuando ni siquiera lo veo o siento. Tener un océano en las manos es como que el color de tu lumbre deje de escondérseme: una partida de damas infinita.

      Conocer nuestros deseos es una ilusión porque no soy el verde que te llevas a la boca en un momento de valentía. Ojalá ser pino o callao. O no, o escapar de la certeza y bailar en el limbo melódico que produces en vano cuando intentas encajar en lo adecuado. "Ser y no saber nada, y ser sin rumbo cierto". Conocer lo que añoramos es como que nos tornemos en sal y agua para escapar de los moldes: una ilusión.